Por Alexander Rocha
Deoni Jones, una mujer transexual asesinada recientemente en el noreste de Washington D.C, ha reavivado tras su muerte las críticas por parte de colectivos de minorías sexuales hacia el trabajo de la policía local.
Organizaciones y activistas defensoras de los derechos de la comunidad LGTB han vuelto a exigir a las autoridades estadounidenses que incrementen las medidas que llevan a cabo para impedir los múltiples asesinatos que han tenido lugar en los últimos meses en contra de la población transexual.
El activista Jason Terry, perteneciente a la Coalición Transexual de Washington D.C, ha exigido al Departamento de Justicia que inicie una investigación para conocer si la policía está actuando y tomando todas las medidas necesarias para impedir el preocupante aumento en el número de asesinatos de personas transexuales.
"Han habido más asesinatos confirmados de personas transexuales en Washington D.C que en cualquier otra ciudad de Estados Unidos desde el año 2000. Sin embargo, solo una cuarta parte de estos han sido resultados", ha recordado el activista.
Jason Terry ha condenado que "solo en 24 horas durante el pasado mes de marzo tuvieron lugar tres ataques que dejaron a las víctimas, dos hombres homosexuales y una mujer transexual, con lesiones graves que necesitaron hospitalización".
Portavoces del Departamento de Justicia han aceptado la petición de los activistas para investigar la situación existente, recordando su compromiso para trabajar con las distintas partes a favor de la erradicación de la transfobia.
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