La organización Transgénero Hidalgo cumple 14 años de existencia, en activismo por los derechos de su comunidad, salud sexual y mejores condiciones en el desempeño del trabajo sexual para este grupo históricamente marginado.
por Alejandro Ávila Huerta
Pachuca, Hgo., México (DESDEABAJO).- A mediados de los noventas, ser mujer trans y ejercer el trabajo sexual en el centro de Pachuca era motivo para ser víctima diaria del abuso de la policía municipal, de una decena o más de elementos de seguridad para detener arbitrariamente a veces a una sola persona, extorsionarla, violentarla físicamente, torturarla emocionalmente hasta los actos más degradantes.
Catorce años después de creada la organización de la sociedad civil Transgénero Hidalgo, presidida por Karen Quintero, los progresos en las condiciones de vida del grupo son evidentes; si la transfobia de Estado y la de mucha gente de todos los días ha crecido hasta confinarlas en un inseguro espacio en el que los crímenes de odio han llegado al asesinato, al menos la lucha en su contra se hace ahora en otro nivel, desde otra posición, que la ha modificado no en su estructura pero sí en una superficie a partir de la cual poco a poco permeará.
“Ha habido cambios, encuestas que reflejan avances y retrocesos, pero nos hemos ganado un respeto y vamos muy bien, lo que es muy importante para nosotros. Ya nos preguntan en qué escuela o colonia vamos a estar, nuestros próximos eventos, y ésa es nuestra idea, seguir trabajando en salud, gestionar un proyecto para el abasto de condones femeninos, ya que el próximo año nos enfocaremos a las adolescentas, debido al aumento de embarazos a temprana edad”, comenta Quintero.
La celebración por este tiempo de activismo –prevista para los pasados días 9 y 10- se vio aplazada al próximo mes de octubre por la negativa de las autoridades locales para llevar a cabo en plazas públicas de la ciudad eventos que no tengan que ver con el Bicentenario. Se planea una jornada de eventos culturales de diversidad sexual con la participación de otros estados para que la ciudadanía vea lo que Transgénero Hidalgo hace durante todo el año y lo que han hecho los últimos catorce a favor de ella.
Además trabajan, junto con la presidencia de Mineral de la Reforma –encabezada por Miguel Escamilla Baños-, en el proyecto de reubicación de su zona laboral en el trébol de La Paz, a decir de la activista, un lugar viable por no ser una zona residencial, su cercanía con el área de comercios dedicados también al trabajo sexual y, sobre todo, su tranquilidad. “La seguridad fue lo primero que se puso en la mesa con el presidente y él está en la mejor disposición de ofrecer lo que sea necesario. Hemos recibido una buena atención por parte de la policía municipal desde que estamos en la colonia 11 de julio”.
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