El vitral muestra la imagen de un Cristo que a su espalda tiene un arcoíris. No es el único, a la derecha de la imagen y en las paredes del altar hay más colores del arcoíris. No es mera coincidencia, es una iglesia a donde asisten integrantes de las comunidades Gay, Lésbico, Bisexual, Transexual y Transgénero (GLBTT).
El altar es de la Iglesia de la Reconciliación, ubicada en la ciudad de México, una de las al menos 15 iglesias cristianas en México que le dan un espacio a la diversidad sexual; otra iglesia está en Tijuana, y es Refugio La Esperanza.
A pesar que ambos templos les dan un espacio a integrantes de la misma comunidad, que son marginados por parte de las principales instituciones religiosas, tienen objetivos diferentes, unas aceptan la homosexualidad, otras tratan de liberarlos del "espíritu de homosexualismo" que los posesionó cuando fueron víctimas de abuso sexual.
Lo anterior se muestra en la investigación y video "Marginados de la fe. Religión y diversidad sexual en Tijuana y Ciudad de México", dirigida por el doctor Alberto Hernández, del Colegio de la Frontera Norte.
En la presentación del trabajo se expone que "en las últimas décadas, el debate sobre las preferencias sexuales en México ha tomado gran relevancia ya que ha contribuido a mostrar por un lado, el carácter conservador de ciertas instituciones religiosas y políticas, las cuales han emprendido campañas en contra de la diversificación de las preferencias sexuales a lo largo del territorio nacional, y por otro, ha ayudado a visibilizar la expresión social y cultural de personas no heterosexuales como lo son las comunidades Gay, Lésbico, Bisexual, Transexual y Transgénero".
Añade que miembros de estas comunidades emprenden una búsqueda religiosa en donde la aceptación o el rechazo los sitúan no solo fuera de sus comunidades sino al margen de las instituciones religiosas y de sus derechos fundamentales.
El video muestra las diversas creencias y prácticas devocionales ejercidas por personas no heterosexuales, tomando como casos una iglesia cristiana en la ciudad de Tijuana y otra en la Ciudad de México, cuyo trabajo está orientado específicamente hacia personas de distintas preferencias sexuales.
A través de un análisis comparativo se abordan los casos de estudio mostrando sus diferencias, sus puntos de encuentro y las diversas labores que realizan, apunta.
"El presente estudio pretende dar una muestra de la marginación hacia estos colectivos por parte de las principales instituciones religiosas y, de la misma manera, contextualizar esta situación con el debate en torno a las preferencias sexuales en México, su estigmatización en los medios de comunicación y el escaso o condicionado apoyo con el que cuentan al momento de que miembros de estos comunidades emprenden una búsqueda espiritual", subraya.
A continuación el trabajo, en el cual participaron Jhonnatan Curiel, Marina Viruete y Ricardo Silva:
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