El amor no entiende de distancias,
de edad, de sexo, de identidad sexual, de razas ni de alturas. En las
redes sociales está haciendo furor la pareja formada por Anton Kraft,
un culturista enano de Florida, Estados Unidos, y su novia China Bella,
una escultural mujer transexual de un metro noventa de altura.
Cupido les disparó las flechas hace menos de un año, cuando el hombre de 52 años y la mujer de 43 unieron sus vidas. A ella le enamoró la fuerza de él, que es capaz de levantar cuatro veces su peso, y a Anton la exquisita feminidad de su chica. “En este momento me siento el hombre más afortunado del mundo” ha explicado el atleta al Daily Mail, que es quien ha dado a conocer este romance.
Eso sí, los compañeros del citado medio parecen conocer poco sobre cómo hay que hablar de transexualidad, pues en él se puede leer “Florida es uno de los estados que tiene bodas para personas del mismo sexo y ambos básicamente son del mismo sexo”, dando a entender que China no es una mujer por el hecho de ser transexual.
El propio Anton tiene también algún comentario desafortunado, como cuando indica que “'me gusta salir con una mujer trans porque nació varón, y está haciendo todo lo posible para llegar a ser tan femenino como sea posible” y que “la mayoría de las mujeres nacidas como las mujeres no emplean tanto tiempo en su apariencia” como su chica.
¡Cuánto queda aún por trabajar en materias de transexualidad para no caer en tópicos obsoletos que perpetúan la discriminación y comentarios poco acertados como estos!
Cupido les disparó las flechas hace menos de un año, cuando el hombre de 52 años y la mujer de 43 unieron sus vidas. A ella le enamoró la fuerza de él, que es capaz de levantar cuatro veces su peso, y a Anton la exquisita feminidad de su chica. “En este momento me siento el hombre más afortunado del mundo” ha explicado el atleta al Daily Mail, que es quien ha dado a conocer este romance.
Eso sí, los compañeros del citado medio parecen conocer poco sobre cómo hay que hablar de transexualidad, pues en él se puede leer “Florida es uno de los estados que tiene bodas para personas del mismo sexo y ambos básicamente son del mismo sexo”, dando a entender que China no es una mujer por el hecho de ser transexual.
El propio Anton tiene también algún comentario desafortunado, como cuando indica que “'me gusta salir con una mujer trans porque nació varón, y está haciendo todo lo posible para llegar a ser tan femenino como sea posible” y que “la mayoría de las mujeres nacidas como las mujeres no emplean tanto tiempo en su apariencia” como su chica.
¡Cuánto queda aún por trabajar en materias de transexualidad para no caer en tópicos obsoletos que perpetúan la discriminación y comentarios poco acertados como estos!
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Nota: A mi no me parece el comentario de Antón desafortunado pues se refiere con respeto a su pareja como una mujer trans. Nadie puede negar lo innegable: nacimos "varones" u "hombres" física, cromosómica y genéticamente. El problema es que en realidad debería decirse "macho" de la especie humana, pero ese término puede confundir aún mucho más, pues se le asocia inmediatamente con el género y la identidad "masculina". El caso como el de China, por el contrario, es el de una mujer, por que precisamente, su género y su identidad es el de una mujer. Por supuesto, las mujeres trans, para evitar no sólo confusiones ni calificativos discriminantes, preferimos que simplemente se refieran a nosotras como "mujeres". Lo importante es el AMOR que sienten uno por el otro. Punto. Lo que si es discriminante es que se refieran a Anton como "enano", que si es un término despectivo. Yo preferí poner "de baja estatura".
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