Amanda Simpson supo antes que la mayoría de los actuales pilotos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos lo que se sentía al estar al mando de las versiones modernas de un T-39 o un A-3, también conocido como El guerrero del cielo. Los dos modelos fueron desarrollados durante la década de los 50 y con el paso del tiempo aparecieron nuevas y mejoradas versiones, una misión que recayó en la empresa de desarrollo aéreo Hughes Aircraft.Hoy, en los registros laborales de esta compañía, el nombre de Amanda Simpson no aparece en el listado de personas que han ocupado una plaza dentro de su staff de pilotos de prueba. En cambio figura el nombre de Mitchell Simpson, un hombre versátil para volar aeronaves.
La vida del piloto dio un giro radical en 1999, cuando luego de 39 años de vivir como hombre hizo escala en el quirófano y se convirtió en mujer. Mitchell dejó de ser Mitchell para ser Amanda. Según el Arizona Daily Star, el cambio constó de seis cirugías y de un precio cercano a los US$70.000.
Después de poco de más de diez años de aquella decisión, Amanda Simpson se convirtió esta semana en el primer transgenerista que ocupa un cargo federal designado por el presidente de los Estados Unidos. Él la nombró como consejera técnica del Departamento de Industria y Seguridad del Ministerio de Comercio, un cargo en el que la labor principal consiste en supervisar las exportaciones de material de guerra.
Los 1,82 metros de altura y la larga cabellera rubia de Simpson se roban actualmente un gran número de páginas de la prensa norteamericana. Las noticias hablan de una decisión gubernamental histórica y de la experiencia de esta mujer en materia de defensa. A su currículo, además de sus años de experiencia como piloto, se suma su desempeño como especialista en desarrollo de nuevas tecnologías de Raytheon Missile System, una reputada empresa privada de seguridad.
La asignación fue calificada por The New York Post como un hito para la comunidad transexual y publicó las declaraciones de la nueva consejera: “Si mi nombramiento y la visibilidad de trabajar para el gobierno federal ayuda a cambiar la mente de algunas personas y sirve a otra gente para conseguir trabajos para los que antes eran rechazadas, estaré encantada”.
Más allá de que la hoja de vida de Amanda Simpson sea el soporte de su competencia para el cargo, diversos análisis han interpretado su nombramiento como una estrategia política de Obama para congraciarse con la comunidad gay. A pesar de que tradicionalmente los grupos de homosexuales han estado del lado del Partido Demócrata, en noviembre del año pasado anunciaron el retiro de su apoyo al presidente luego de que se opusiera al matrimonio de personas del mismo sexo.
(Tomado de Elespectador.com)
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