Mientras el proyecto de ley para instituir el matrimonio homosexual que el Ejecutivo nacional envió al Congreso el 29 de octubre espera ser tratado, en Mendoza el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) buscará impulsar una norma que permita la unión civil entre personas del mismo sexo, cuyo proyecto será presentado hoy en la Legislatura.
En el organismo que lucha contra la discriminación aseguraron que lo que la norma pretende es asegurar a las parejas homosexuales los mismos derechos civiles que tienen las heterosexuales.
“Hay muchos que no se quieren casar y conviven, y la ley les permite acceder a los derechos obtenidos por la unión civil. Queremos que las parejas de personas del mismo sexo tengan la misma posibilidad”, comentó Karina Ferraris, delegada local del Inadi.
La norma, entonces, no significaría la legalización del matrimonio homosexual, que requiere de una modificación del Código Civil y que sólo puede realizar el Congreso, sino la posibilidad de que las parejas puedan acceder a la unión civil independientemente del sexo de los contrayentes.
La unión civil reconoce derechos sociales como incorporar a la pareja a la obra social, recibir una pensión de organismos que dependen del Gobierno, solicitar créditos bancarios conjuntos y obtener licencia laboral en caso de enfermedad del concubino.
“Según nuestra encuesta, más del 60% de los mendocinos aprueba el matrimonio de personas del mismo sexo”, comentó Ferraris, para quien Mendoza “no es una provincia conservadora como muchos creen, sino que está en un término medio con relación al resto del país en cuanto a la aceptación de la diversidad sexual”.
Banshi, titular en Mendoza de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros Argentinos, indicó que “muchas chicas conviven con sus parejas y necesitan de una norma de este tipo para acceder a los beneficios legales que implicaría”.
El tema enciende siempre fervorosas polémicas entre quienes están a favor de la diversidad sexual y los que consideran que el matrimonio sólo es igual a un hombre más una mujer, y los legisladores consultados por Ciudadano manifestaron posiciones disímiles.
Pese a que todavía no se conocen detalles del proyecto, Carlos Bianchinelli, líder del bloque peronista en Diputados, adelantó que su opinión es que “no tiene que haber discriminación”.
“No estoy en desacuerdo, y considero que no se puede privar a una persona de los beneficios de la unión civil. Además, una pareja homosexual es algo que vemos habitualmente en la televisión, en la calle. ¿Quién no tiene un amigo de esa condición?”, reflexionó el legislador, quien solicitó, al menos, la discusión del tema. “Es muy importante que en una sociedad democrática se manifiesten las posturas, sean a favor o en contra, pero siempre con mucho respeto y sin agredir”, dijo el diputado.
Sobre una posible votación, Bianchinelli explicó que “se dará libertad de acción”, tal como sucedió cuando se derogó el artículo 80 del Código de Faltas, que penaba el travestismo”.
En el Partido Demócrata, en cambio, el diputado Diego Arenas manifestó un enérgico rechazo a una ley de este tipo.
“Estoy absolutamente en contra”, explicó, y dijo que aunque no puede adelantar la posición del bloque, “los demócratas tenemos un concepto muy clásico y conservador del matrimonio”.
En tanto, en el Confe el titular del bloque en Diputados Andrés Marín dijo estar “totalmente de acuerdo. Le estaríamos dando un marco jurídico a situaciones de hecho. Además, la Justicia los reconoce”, comentó el legislador ante una consulta.
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