España/Tenerife: Organización "Si se puede", reclama políticas activas para fomentar la igualdad de derechos de las personas transexuales y transgénero

Comunicado

Reclaman una Ley Integral de Transexualidad que garantice la no discriminación por motivos de identidad de género 

Con motivo de la celebración este viernes del Día Internacional contra la Homofobia, la portavoz Insular de Igualdad de "Sí se puede" en Tenerife, Paqui Rivero, ha mostrado el apoyo de su formación a medidas en favor de las personas trans, que incluye tanto a personas transexuales como transgénero.

Para la portavoz ecosocialista es necesario que desde las instituciones se promuevan medidas para alcanzar la igualdad necesaria que incluya a estas personas porque todavía encuentran importantes dificultades para poder normalizar su vida y grandes diferencias en el trato que reciben por parte de la sociedad y de los poderes públicos.

En este sentido, reclama una Ley Integral de Transexualidad que garantice la no discriminación por motivos de identidad de género y el reconocimiento de los derechos de este colectivo.

En esta ley deberían incorporarse fórmulas para facilitar la atención de estas personas por parte de la sanidad pública, acabando con los prejuicios actualmente existentes y ofreciendo unos protocolos que ayuden a despatologizar los tratamientos que estas personas demandan y merecen.

La formación de izquierdas apoya estas demandas y apuesta por trasladar este debate a la sociedad “para que sigamos avanzando realmente en las políticas de igualdad y respeto a la diversidad”.

Desde Sí se puede apoyan también la realización de campañas a favor de la diversidad afectivo sexual, de normalización de la homosexualidad, el lesbianismo, la transexualidad, la bisexualidad y la intersexualidad, así como de asunción del concepto de diversidad familiar, “incluyendo también en las campañas publicitarias institucionales a las personas LGTBI y sus familias”.

Rivero indica igualmente que otra importante demanda del colectivo de personas trans es el acceso al trabajo en igualdad, sin sufrir discriminación en base a su identidad u opción sexual. Finalmente reclama también recursos para una educación en igualdad, que incorpore en los centros escolares una educación afectivo-sexual integral, desarrollada desde parámetros de respeto absoluto de la diversidad afectivo-sexual humana, de tolerancia y de resolución pacífica de conflictos.