Alrededor de las dos de la mañana se escuchó el llanto de una mujer que decía: "Qué voy a hacer sin ella", y fue cuando familiares y amigos se estrecharon fuertemente, pues a esa hora se confirmó el presunto homicidio de Agnes Torres Sulca, mujer transexual y activista por los derechos sexuales y reproductivos desde la perspectiva de los Derechos Humanos y defensora del reconocimiento a la Identidad Sexual Genérica en Puebla, cuyo cuerpo fuera encontrado el pasado sábado en la barranca Xaxocuapatle de Atlixco, cerca de la autopista Siglo XXI tras haber sido degollada y torturada.
El cuerpo de la víctima fue encontrado por un pastor, en estado semidesnudo y el cual portaba implantes de senos, uñas largas y arregladas, cabello largo a la cintura, lentes de contacto de color y cejas depiladas; vestía, asimismo, una blusa de tirantes, faja, y chamarra café. Dicha persona presentaba quemaduras en el brazo derecho y en el costado del mismo lado, y sus agresores le ocasionaron la muerte degollándola.
Ante ello, la comunidad activista por el reconocimiento de la Identidad Sexual Genérica lanzó un fuerte llamado al Gobierno del Estado de Puebla para esclarecer este homicidio y aplicar todo el peso de la ley en contra de los responsables.
Esta es una "exigencia fuerte, por lo que observaremos el desarrollo de la causa penal (cuyos resultados) los vamos a cuestionar pero no en un sentido negativo, sino para que se hagan las cosas como deben ser y en estricto apego a la ley", sentenció el activista y vocero Marco Antonio Moreno, quien subrayó que para el movimiento Lésbico, Gay, Transexual y Bisexual de Puebla (LGTB) es fundamental que este "doloroso" caso se resuelva, ya que Agnes Torres representaba los intereses de muchas otras personas.
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